Año 1810 y el Rey Cautivo, ¿Cómo repercute en Chile estos hechos? ¿Fue el detonante de aquel martes 18 de septiembre?
Inicia 1810, y los dubitativos chilenos son sorprendidos con una noticia el día 25 de mayo, en que los criollos argentinos, al enterarse del aprisionamiento de Fernando VII, deponen al virrey Cisneros, estableciendo una junta gobernante en nombre del rey cautivo. En otro país, Ecuador, había sucedido lo mismo el año previo, con una junta en Quito (incluida declaración de independencia) pero fue ahogada violentamente en 1810. Otros hechos similares, de sublevaciones ocurren por ejemplo en Chuquisaca, la actual Sucre, de Bolivia. Todo detonado por el “vacío” de poder.
Carlota Joaquina, princesa, hermana del rey Fernando VII, que contrajo nupcias con el rey de Portugal, era la única integrante de la familia real española en libertad (pero en Brasil), la que intenta establecer un protectorado sobre las provincias de La Plata. Algo que resulta en nada, ante el desinterés y despreocupación mostrado hacia ella.
En Santiago García Carrasco cometía un gran error, al apresar 3 importantes ilustrados, el abogado argentino Bernardo Vera y Pintado (secretario del Cabildo), Juan Antonio Ovalle (procurador del Cabildo) y el amigo de Martínez de Rozas, José Antonio Rojas, era un golpe a la élite intelectual (ilustrada). Pero Rojas era el que más relevancia social tenía, al ser un motor intelectual de la independencia en Santiago, teniendo un alto número de adeptos a su causa. Vera se hace el enfermo para eludir castigo alguno, pero Ovalle y Rojas son expulsados a las cárceles limeñas.
Mientras en Sevilla, la Junta Central, el órgano administrativo con el que España oponía resistencia a Francia, da paso a un “Consejo de Regencia” cuyas sesiones eran en Cádiz, concentrando más poder que la Junta.
El próximo objetivo de García Carrasco era el alcalde de Santiago, Agustín de Eyzaguirre. Ante lo que el 13 de julio de 1810, cientos de vecinos se juntan en la Plaza Mayor, hoy Plaza de Armas, completamente armados. Al final no sucede nada, quizás porque hacía mucho frío ese día, pero otros miembros del cabildo estaban decididos a juntar gente en contra de García Carrasco y España. La Real Audiencia comprende que García Carrasco debía dejar el cargo, al generar repudio en el pueblo, y así evitar una nueva situación como las de Buenos Aires. No fue fácil convencerlo, se tuvo que recurrir a un cura, que era su confesor, para convencerlo. Finalmente, el lunes 16 de julio, García Carrasco traspasa el poder a Mateo de Toro y Zambrano, millonario de ochenta y tres años, un hombre muy deteriorado, pero tenía el flamante título de “conde de la Conquista”, y era el hombre más antiguo del ejército, por lo cual fue seleccionado.
Mateo de Toro y Zambrano, tendría unos próximos días difíciles, presionado por los dos bandos de la elite. Por un lado, sus dos asesores de la idea independentista, Gregorio de Argomedo y Gaspar Marín. Por el otro lado el sector moderado, lo instaba a jurar fidelidad al “Consejo de Regencia”.
En febrero de 1810 el “Consejo de Regencia” había dado instrucciones para que las colonias eligieran diputados, los que se trasladarían a un gran consejo en Cádiz, para ver como continuaría el imperio español. Este consejo reunía a españoles de los dos bandos, a los absolutistas con José Bonaparte, y los que no querían a Napoleón. Esto con la posterioridad sería relevante, ya que daría paso a la Constitución española de 1812, conocida como “la Pepa” por haber sido promulgada el día de San José.
A principios de septiembre de 1810, a Santiago, llegan las noticias de que las fuerzas de la Junta de Buenos Aires se dirigían a aplastar a los partidarios del rey que dominaban Córdoba y Charcas. La idea de que estas fuerzas vinieran a “castigar” a Santiago por indeciso, era poco probable, pero los ilustrados aprovecharon esto para forzar a De Toro y Zambrano a convocar una asamblea. El día 13 de septiembre, el conde convoca a la asamblea, entendiendo que su decisión podría acarrear graves consecuencias, pero viéndose en su edad y estado de salud, poco le importaba. La asamblea de notables (o cabildo abierto) se reuniría el 18 de septiembre, un día martes.